Análisis de Devil May Cry V Special Edition - Un Vergel de acción de nueva generación
Devil May Cry V fue uno de los títulos más impresionante del final de la pasada generación y, por supuesto, no podía perderse la cita con la llegada de las nuevas máquinas de Microsoft y Sony. De este modo, durante los últimos días ya hemos podido disfrutar de Devil May Cry V Special Edition en PlayStation 5, pudiendo observar sus mejoras gráficas y el uso que le da la propuesta a la tecnología háptica del DualSense, uno de los grandes atractivos de la consola de nueva generación. No obstante, no es lo único que invita a hacerse con este título si ya se jugó el pasado año.
Con Vergil hasta el infierno
Y es que si Devil May Cry V ya disponía de una propuesta jugable de lo más variada en la que se incluían tres personajes como Nero, Dante y V, ahora también se añade a la fórmula la posibilidad de disfrutar del título con Vergil, uno de los personajes más míticos de la licencia de Capcom. De este modo, el título original se puede gozar de principio a fin controlando a dicho personaje, lo que además de ofrecer nuevos detalles del argumento y de su camino durante el periplo de la quinta entrega, también supone un soplo de aire fresco por sus nuevos movimientos y armas, que hacen las delicias de todos los amantes del hack n slash, con un plantel de combos de lo más impresionantes para dar rienda suelta a las combinaciones más espectaculares.
Cuestión de resoluciones
Uno de los grandes debates que va a abrir la nueva generación de consolas es el concerniente a las diferentes configuraciones en las que se puede disfrutar un juego. En el caso de Devil May Cry V Special Edition no iba a ser menos y me parece un asunto importante que tratar para iniciar este análisis porque es una de las primeras decisiones que hay que tomar en cuanto arranca el videojuego. ¿Prefieres disfrutar de la gran novedad gráfica como el raytracing? Si es así, has de saber que tienes que sacrificar un elemento básico para un título hack n slash como este: los 60fps. Si prefieres disfrutar de la fluidez de la tasa de frames, no podrás vislumbrar las mejoras en los reflejos y la iluminación.
Expuesto este asunto, ¿merece la pena? Pues bien, el caso de Devil May Cry V Special Edition es bastante llamativo, pues el salto cualitativo en este aspecto no es todo lo espectacular que se pudiera llegar a pensar, por lo que el raytracing no es un elemento fundamental para un disfrute superlativo de la aventura. ¿Se nota? Sí. ¿Hay una clara mejora gráfica que justifique reducir el rendimiento a los 30fps? Ni por asomo. Por lo tanto, la mejor configuración posible es la que se adopta con el 4K y los 60fps, aunque con ello se prescinda del raytracing. De hecho, si tu TV soporta los 120Hz, incluso podrás disfrutar de Devil May Cry V Special Edition a 120fps, lo que será una completa gozada para contar con la mayor fluidez que puedas experimentar en el título y aquí eso es más importante que nunca.
La experiencia pura de DMCV, mejorada al extremo
Si ya tuviste la oportunidad de jugar a la propuesta original, tal vez no creas que sea una buena opción darle una nueva pasada al título con Nero, Dante y V, pero si sigues esa corriente, te estarás perdiendo una ocasión perfecta de garantizarte la mayor experiencia posible con Devil May Cry V. Más allá de ofrecerte un rendimiento estable a los mencionados 60fps, hay más mejoras gráficas que trascienden más allá del uso del raytracing. Las texturas se han mejorado de manera notable y todo luce de manera más nítida, por lo que a nivel gráfico quedarás completamente satisfecho con el resultado. No obstante, el gran cambio llega de la mano de la velocidad que permite el SSD de PS5.
Y es que lo de los tiempos de carga se va a convertir en un motivo más que suficiente para dar el salto a la próxima generación. Si en PS4 los tiempos de carga superaban los 20 segundos, aquí se reducen de manera más que notable. Tan solo 8 segundos desde que se inicia el juego hasta que aparece la pantalla del menú y poco más de 2 segundos cada vez que se produce una transición de cualquier tipo. Desde luego, este tipo de prestaciones son de lo más satisfactorias en títulos tan exigentes como el que disponemos en esta ocasión y más si cabe si eres uno de los jugadores que buscan el reto más exigente, con lo que es posible que mueras en innumerables ocasiones. Con ello, se hará mucho más llevadero el tener que reintentar las zonas que te provoquen más complicaciones.
No cabe duda de que el trabajo realizado por Capcom en este aspecto permite disfrutar de la mejor experiencia posible en Devil May Cry V, si bien es cierto que tal vez no sea el mejor título para demostrar de qué es capaz la próxima generación de consolas. Es una propuesta interesante y que mejora en gran medida su rendimiento, pero su aspecto no dista en demasía sobre lo que ya ofreció en la pasada generación, por lo que no es un claro indicativo en aspecto visual, sino más en rendimiento. Algo que, honestamente, le sienta de perlas a unas propuesta de este estilo, por lo que no hay nada que reprochar.
Para todos aquellos que quieran experimentar una mejora que se adecúe más a lo que puede ofrecer PS5 en lo visual, siempre pueden activar el modo de 4K/30fps con raytracing, lo que permitirá ver mejoras notables en la iluminación de la ciudad y de los diferentes terrenos, así como un excelente uso del HDR, mejorado para la ocasión, que le dan un aspecto mucho más cuidado en lo visual, aunque no sea su principal objetivo. De hecho, se nota que se ha mimado más la configuración de rendimiento para garantizar la experiencia más satisfactoria.
En relación a las capacidades de la consola de nueva generación de Sony, lo que sí exprime Devil May Cry V Special Edition es el uso del audio 3D, que con el uso de auriculares adquiere una nueva dimensión más inmersiva. Como bien sabrás, en la saga siempre se acompañan los combos frenéticos con música cañera, que ahora se disfruta mucho más gracias al sonido espacial. Por otro lado, la tecnología háptica del DualSense también está presente, con vibración y sonidos procedentes del mando que aportan ese toque especial de los combates con espada o los disparos de las armas de Nero y de Dante. Además, los gatillos adaptativos también ofrecen la resistencia precisa para el uso de diferentes armas, con lo que la experiencia es muy diferente a lo que se pudo vivir en PS4.
Vergil, la auténtica estrella de la propuesta
Por si todo esto no fuera suficiente, hay un elemento más que se une a la estupenda ecuación de Devil May Cry V Special Edition: la posibilidad de jugar con Vergil. Obviamente no te vamos a destripar absolutamente nada de la línea argumental y de lo nuevo que se ha añadido en relación al personaje, pero la frescura en el gameplay está garantizada con la adición del hermano de Dante. Y no es solo una inclusión que permita controlar al personaje y a su variedad de armas, como la mítica katana Yamato, sino que Capcom ha realizado el trabajo desde cero para ofrecer la imagen más fiel del personaje.
De este modo, Vergil cuenta con un set de movimientos y animaciones totalmente exclusivas y que encajan a la perfección con el uso de sus armas. El refinado toque del personaje con Yamato está presente en todos sus combos, asestando estocadas elegantes y letales. Por otro lado, está el regreso de Beowulf, los dominantes puños de Vergil que son mucho más fieros y potentes, por lo que se pierde en rapidez para hacer un mayor daño. En este sentido, también se nota como las animaciones se hacen más pesadas y menos estilísticas. Por último, está una de las armas más especiales del personaje: Miracle Edge. Esta espada envuelta en un halo mágico que hace uso de poderosos combos y que puede ser la mejor elección para los momentos más exigentes contra los jefes.
De hecho, la rápida combinación entre las tres armas son un elemento más a tener en cuenta en la versión de PS5, pues la transición entre el cambio de las mismas se realiza de manera instantánea y la respuesta es soberbia, con lo que no perjudica en absoluto al gameplay y resulta mucho más frenético y natural. Los amantes del hack n slash quedarán encantados en este aspecto, aunque por supuesto no es una medida exclusiva de Vergil, sino de los cuatro personajes jugables.
Nuevos modos para los más exigentes
Por último, para completar esta edición especial, hay dos modos de juego inéditos en la propuesta original: el modo Turbo y Caballero Oscuro Legendario. Ambos están llamando a ganar un gran protagonismo para todos aquellos que busquen un reto mayúsculo y no defrauda en absoluto. El primero de ellos se basa en una aceleración de la partida en un 20%, por lo que hay que ser mucho más preciso y veloz a la hora de realizar los combos y responder o esquivar a los ataques enemigos. Un auténtica locura que solo es apta para los auténticos maestros del género.
Por otro lado, se encuentra el nuevo modo de dificultad Caballero Oscuro Legendario, que añade muchos más enemigos en pantalla (sin comprometer el rendimiento de los 60fps en el modo rendimiento) y que garantiza la utilización de combos sin fin para obtener la calificación de SSS en todas las misiones, aunque para ello hay que hacer alarde de una tremenda habilidad, ya que el aumento de los enemigos es más que significativo y pone las cosas realmente difíciles para avanzar sin pasarlas canutas.
Por supuesto, no falta el Palacio Sangriento para todos aquellos que quieran disfrutar de los diferentes niveles que ofrece el modo más clásico y exigente de la saga Devil May Cry.
El Devil May Cry definitivo
Aunque la propuesta argumental no se desvíe mucho de lo que ya se vio en PS4 y Xbox One, la Special Edition de Devil May Cry V añade suficientes contenidos para satisfacer las necesidades de todos los seguidores de la licencia de Capcom. El simple hecho de poder jugar a los mandos de Vergil se antoja como un motivo suficiente para hacerse con él, pero la implementación de nuevos modos y de las funciones tecnológicas que permite PS5, lo convierten en un videojuego con una experiencia totalmente diferente a lo que se vivió por primera vez hace casi dos años. Si te gusta la saga, no te puedes perder esta nueva versión de la quinta entrega para disfrutar de su frenetismo desmedido y de su acción infernal.