Análisis de Tokyo Mirage Sessions #Fe Encore - La dura vida del estudiante-idol

Enero de 2013. Wii U llevaba muy poco tiempo en las tiendas y Satoru Iwata salió al paso con un Nintendo Direct que muchos fans de Nintendo recordarán con especial cariño. Fue en esa emisión en la que se vio por primera vez lo que acabaría siendo Xenoblade Chronicles X y fue ahí, también, donde se anunció una colaboración casi surrealista: Shin Megami Tensei x Fire Emblem.

Poco sabemos de cómo sería la idea original de Nintendo y Atlus con este proyecto, pero sí de lo que acabó llegando a las tiendas. Tras mucho silencio, la Gran N levantó el telón y anunció Tokyo Mirage Sessions #Fe, un crossover/spinoff que reunía ambos mundos en un RPG por turnos kawaii por los cuatro costados. Un título que llegó a Wii U pasando sin pena ni gloria, pero que ahora tiene la oportunidad de volver a subirse al escenario.

Switch, que se ha convertido en el expositor perfecto para resucitar aquellas joyas que no lograron brillar con la suficiente fuerza, acoge ahora una versión mejorada de este JRPG con jota mayúscula. Tokyo Mirage Sessions #Fe Encore está a punto de estrenarse, lo hemos jugado a fondo, y tenemos mucho que contaros, o poco, si ya jugasteis al original.

Artistas a jornada partida

Tokyo Mirage Sessions #Fe Encore es muchas cosas al mismo tiempo. Es un juego RPG por turnos que repasa todos y cada uno de los puntos clave del género, añadiendo una jota delante que esta vez tiene más sentido que nunca. Por una parte, por sus clásicas mecánicas; por otra, por cómo bebe de la cultura idol nipona.

Y es que aquí la historia trata de un grupo de estudiantes de instituto que, tras una serie de acontecimientos, descubren que tiene poderes especiales, y no solo eso, sino que van a mezclarse con la flor y nata del "artisteo" japonés. Su vida se pone patas arriba para convertirse en artistas, o idols, teniendo que perfeccionar sus dotes de cante, de baile y de actuación; pero también aprendiendo a lidiar con la otra cara de un mundo que va mucho más allá del alcance de los focos.

Con esta premisa conocemos a Itsuki Aoi, a Tsubasa Oribe, Touma Akagi, Kiria Kurono y muchos más personajes. El reparto principal es amplio, y hace que la trama tenga muchísimo mérito, porque es capaz de detenerse en todos y cada uno de los personajes y darles tiempo suficiente para presentarse, para desarrollarse, para conocerlos a fondos y familiarizarte con todo el reparto.

Divide, pero no aburre. Porque, si bien la primera cara que muestra es la de las actuaciones, la música y las performances; la otra es la que sirve como vehículo para el auténtico grueso del juego. ¿Qué sería de un RPG si solo se centrara en cantar y bailar? Tokio está siendo el lugar de unos acontecimientos muy extraños, y sus responsables son los Mirages, seres de otra dimensión entre los que se encuentra el reparto de Fire Emblem, aunque bastante diferente a como acostumbramos. Entender qué hay detrás de todo eso y no perder el equilibrio con el día a día escolar y profesional es el centro de todo.

Canta y baila, pero también golpea

Con ese centro en lo narrativo y contextual, nos encontramos con que Tokyo Mirage Sessions #Fe Encore es el título perfecto para los amantes de la cultura nipona. Todo, desde sus personajes hasta los diálogos o las situaciones, parece sacado de un manga. Y eso es bueno, pero también malo.

Bueno porque cualquier fan del anime y el manga puede disfrutar de él, sobre todo si hay cierta predilección por el género magical girl; malo porque, si no es lo tuyo, seguramente te cueste darle una oportunidad. A servidor le ocurrió eso mismo al comienzo, pero son precisamente las mecánicas de juego lo que salvan a este título a ojos del público general.

Porque sí, TMS Fe Encore es muy de nicho, pero en su interior mezcla unos conceptos ideales para atraer a cualquier amante del RPG más puro… y duro. Es sumamente intrincado en lo mecánico, y además exige bastante, tanto que aconsejamos guardar cada poco tiempo para no perder horas de progreso.

Combatiendo al son de Fire Emblem y Shin Megami Tensei

Ya hemos hablado de los Mirage y los personajes de los Fire Emblem. Estas criaturas se convierten en los seres que acompañan a nuestro reparto principal, y a su vez se transforman en las armas que estos utilizan. Esta instrumentalización se ha aprovechado perfectamente para trasladar una de las mecánicas propias de la saga Fire Emblem: el triángulo de armas.

Aquí el hacha vence a la lanza, la lanza a la espada y la espada al hacha, como en cualquier FE tradicional (salvo Three Houses); pero también entran en juego las debilidades elementales, algo que TMS #Fe recoge con su otra mano de la saga Shin Megami Tensei, y de la que se podría decir que también recoge el sistema de turnos.

Esos son los dos ingredientes externos del sistema de combate, y en cierta parte del de desarrollo de personajes; pero no son para nada lo único. El punto más importante del sistema de combate son las Sessions, combinaciones de golpes de los personajes que se valen de las debilidades enemigas y que se desbloquean aprendiendo nuevas habilidades. ¿Lo curioso de esto?, que realizar más Sessions sirve para obtener más piezas de los enemigos y, así, poder elaborar nuevos Carnage (armas) para seguir obteniendo nuevas habilidades pasivas y activas. ¿Quieres más? También hay sistema de clases. ¿Te parece poco? También suben de nivel, de forma diferente al nivel del personaje.

Es un conjunto que requiere algo de distancia para ser asimilado, y sobre todo tiempo y tutoriales para entenderlo todo. Afortunadamente, y a pesar de su complejidad y su amplitud, no resulta difícil de dominar. Los responsables han conseguido establecer un sistema repleto de elementos y capas, pero que se puede domar con facilidad, de la dificultad ya se encargan los enemigos.

Más musical que nunca

Tras esa superficie tan propia del anime más kawaii y tras esos diálogos que a veces pueden resultar desquiciantes, se esconde un juego sorprendentemente duro. De hecho, lo de esconderse es literal, porque la dificultad de juego se queda en las Idolaspheres, mazmorras que nacen de la vida de la persona controlada por el Mirage que las rige. Sí, como los Palacios de Persona 5.

Ahí se encuentran puzles, se encuentran combates y se encuentran los componentes que van alimentando la exploración. Ahí se muestra la otra cara que hay tras la Tokio de Shibuya, de los conciertos y de los mensajes por Topic. Esa es la que condensa la esencia que más puede atraer al jugón de los RPG clásicos.

Pero también está lo musical, y es que por algo se sumó al grupo Avex a esta colaboración de firmas y licencias. La discográfica nipona se ha encargado de poner el toque artístico necesario en un juego donde el show siempre debe continuar, y de su mano vienen algunos temas musicales sorprendentemente pegadizos, que suenan en secuencias de corte pensadas para satisfacer a quienes degustan cualquier concierto de J-Pop, incluidos los de las Calamarciñas.

Demasiado bis

Aunque su apariencia engañe y sea más atractivo de lo que aparenta para el mainstream, Tokyo Mirage Sessions #Fe Encore falla en algo que los que jugaran al original más notarán: la falta de novedades de peso. Suma todos los DLC que llegaron de pago al original de Wii U, e incluso añade una nueva historia que transcurre paralelamente a la principal, pero no va mucho más allá.

Y hay alguna que otra novedad adicional que no vamos a mencionar para dar margen a las sorpresas, pero el conjunto no es suficiente. De hecho, si tenemos en cuenta también que no se han atrevido a traducirlo al castellano, da la sensación de que se ha querido jugar sobre seguro. Aportar poco contenido extra que sea relevante y mantenerse muy fieles al original. Un movimiento bien ejecutado, pero poco atrevido.

Tokyo Mirage Sessions #Fe Encore, una segunda oportunidad

Para muchos, probablemente esta sea la primera ocasión de probar TMS #Fe. Quienes ya jugaron a la versión original de Wii U se van a encontrar con un título que ahora se vuelve portátil, que suma algunos extras, pero que no tiene mucho más nuevo que aportar. Aunque también mantiene todo lo bueno y lo malo del original.

Quienes no lo jugaran deben darle una oportunidad. Tokyo Mirage Sessions #Fe Encore es toda una sorpresa por lo que esconde tras su color y su estética anime. Hilvana una historia repleta de clichés en un reparto ideal para una trama sencilla con unas mecánicas propias de un RPG con todas las letras.

No lo juzgues por sus tapas si no te atraen ni el manga ni el anime, porque puedes estar dejando pasar una oportunidad sensacional de descubrir un juego exigente y magnético. De hecho, te acabará atrapando hasta el punto de descubrirte tarareando sus canciones sin querer. Para ese entonces, sentimos decirte que ya será demasiado tarde.